Floribert Bwana Chui, testigo del bien en tiempos de oscuridad
Stanislas Kambashi – Ciudad del Vaticano
La noticia de la beatificación de Floribert fue recibida con “gratitud y alegría†por la Comunidad de Sant’Egidio, especialmente la de Goma, a la que él pertenecía. “La emoción es enorme al ver que ofrecemos a la Iglesia un beato que fue parte de nuestra comunidad. Es un motivo de orgullo, sobre todo para Goma, una ciudad tantas veces asociada con tragedias. Esta vez, tenemos una noticia que alegra a nuestra comunidad aquí y en todo el mundoâ€, cuenta Aline Minani, responsable de la Comunidad de Sant'Egidio en Goma.
Un compromiso con los niños de la calle
Floribert será el primer beato proclamado de la Comunidad de Sant’Egidio. En Goma, lo recuerdan como alguien que quería servir y para quien todas las vidas tenían valor. Estaba especialmente implicado con los niños de la calle, conocidos en kiswahili como “Maiboboâ€. Estos jóvenes, sin hogar, sin escuela y sin perspectivas, recibían toda su atención.
Aline cuenta el caso de Jonathan, un niño de 10 años que quedó varado en Goma tras haberse subido con amigos a un barco en Bukavu. Mientras los otros bajaron, él no pudo salir a tiempo y apareció solo al día siguiente, sin familia ni rumbo. Floribert lo acogió, lo cuidó, y más tarde lo llevó de vuelta a Bukavu, donde logró reunirlo con su familia. Años después, Jonathan aún recuerda a Floribert como “un ángel enviado por Dios para salvarlo de la calleâ€.
Un hombre de paz, unidad y fraternidad
Además de su trabajo con los niños, Floribert era un auténtico promotor de la paz. “Soñaba con un Congo donde todos estuvieran sentados en una misma mesaâ€, recuerda Aline. En cualquier espacio, dentro o fuera de la comunidad, buscaba la felicidad de quienes lo rodeaban. En una foto difundida por Sant’Egidio, se lo ve en una comida de Navidad para los pobres, sentado entre niños. “Ahí no hay distinción entre los que sirven y los que son servidos. Eso era exactamente lo que él queríaâ€, destaca Aline.
Manos limpias y el valor de hacer el bien
Floribert fue asesinado por rechazar un soborno. Se negó a dejar pasar una carga de arroz en mal estado que ponía en riesgo la salud pública. Por ese acto de integridad, fue secuestrado, torturado y asesinado con solo 26 años.
, el Papa Francisco lo citó como ejemplo ante miles de jóvenes en Kinshasa:
“Pudo haberse hecho el desentendido, nadie lo habría notado, y hasta habría ganado dinero. Pero como cristiano, oró, pensó en los demás y eligió la honestidad. Dijo ‘no’ a la corrupción… Si alguien te ofrece dinero o favores, ¡no caigas en la trampa!â€.
Aline invita a los jóvenes congoleños y africanos a seguir ese ejemplo y escribir “una nueva historiaâ€. Cree que hablar de Floribert ayuda a mostrar que es posible ser coherente entre la fe y la vida profesional, resistiendo la tentación del dinero fácil y el egoísmo.
Un referente también para los líderes
Pero su ejemplo no es solo para los jóvenes. Aline sostiene que la vida de Floribert también interpela a quienes tienen poder. En su país, donde el tejido social se desmorona, especialmente en el este –región donde Floribert fue martirizado y donde aún hoy reinan la inestabilidad y la violencia–, su mensaje es más urgente que nunca.
Las ciudades de Goma y Bukavu están hoy bajo control del grupo armado AFC/M23, respaldado por la vecina Ruanda. La violencia ha dejado incontables víctimas. Aline hace un llamado a todos los congoleños para que trabajen por la unidad nacional, recordando las palabras de Floribert: “Sueño con un Congo donde todos estén sentados en la misma mesaâ€.
A los líderes de la región de los Grandes Lagos, les pide valentía para seguir su ejemplo: combatir el mal haciendo el bien, cesar las matanzas, dejar de derramar sangre y construir una paz duradera. “¡Basta de muertes, basta de vidas perdidas!â€, clama. “No podemos permitirnos perder ni una sola vida másâ€.
Una África inclusiva
“En la paz, todos ganan. La paz es como un trozo de pastel que se comparteâ€, dice Aline con convicción. Recuerda que Floribert solía cantar el “Canto de resurrección por Áfricaâ€, himno de Sant’Egidio. “¡Sí, Goma puede convertirse en un jardín de paz! ¡La RDC puede florecer! Cada uno puede plantar un árbol que dé sombra y frutos, incluso en medio del caos, la confusión o el suelo volcánico de Gomaâ€.
Aline desea que la beatificación de Floribert sea un momento que una al pueblo congoleño, que los inspire a reflexionar sobre su realidad y les dé esperanza.
La misa con el rito de beatificación será presidida el domingo 15 de junio de 2025 por el cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, a las 17:30 en la basílica de San Pablo Extramuros. Concelebrarán el cardenal Fridolin Ambongo, arzobispo de Kinshasa, y Mons. Willy Ngumbi, obispo de Goma, diócesis natal de Floribert. La familia del futuro beato, congoleños venidos de distintas regiones y la comunidad congoleña en Roma ya se preparan para este gran acontecimiento, al que también asistirá una delegación oficial del gobierno congoleño.
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